Días importantes para practicar hechizos
Existen días en los que la efectividad de los hechizos se hace más fuerte debido a que la energía es más poderosa, y aún más si hay luna llena o creciente.
La Candelaria (2 de febrero)
En este día realizaremos una limpieza para librarnos de todo lo malo del pasado y para afirmar nuestro futuro. Este ritual se debe realizar mientras sucede la salida del sol.
Colocaremos en medio de una habitación cuatro velas blancas formando un cuadrado y en el centro colocaremos un bol con agua salada, preferiblemente si es agua de mar. Una vez que comience a verse la salida del sol, encendemos las velas y nos sentamos dentro del cuadrado observando la salida del astro mientras meditamos sobre las cosas buenas que están por llegar.
Halloween (31 de octubre)
Esta noche es la más importante para la brujería, marca el final de una etapa y principio de otro, por lo que es ideal para cortar con todo lo negativo que rodea nuestra vida.
Colocaremos dentro de una fuente de barro con agua mineral y pétalos de rosas, un espejo. Si este es de forma redonda mejor.
La vigilia de San Juan Bautista (23 de junio)
Dibujaremos un círculo en el suelo, este podemos hacerlo con tiza o bien marcándolo con polvo de talco. En el medio nos situaremos nosotros y alrededor y marcando los distintos puntos cardinales, posicionamos cuatro velas de distinto color. En el sur una vela roja, en el norte una marrón, en el este una amarilla y en el oeste una verde.
Una vez que hemos colocado todos los objetos nos concentramos y encenderemos las velas para seguidamente decir en voz alta:
“Me siento protegido, me siento bien. Que todo mal desaparezca y que me llene de la luz protectora de esta noche. Amén”
Acto seguido apagaremos las velas en sentido contrario a las agujas del reloj y comenzaremos a sentirnos cargados de energía positiva.
La fiesta de las cosechas o Lammas (1 de agosto)
Esta es otra fiesta de origen pagano que se inició para dar las gracias a los dioses por las cosechas, garantizando así una buena producción. En su origen el día para su celebración estaba marcado por el Sol, en torno al 6 de agosto, pero hoy en día nosotros lo celebramos el 1 de agosto.
Es una fecha muy propicia para pedir prosperidad y riqueza.
Debemos colocar en un cuenco, preferiblemente elaborado en materiales naturales, nada de plástico, los siguientes ingredientes: hojas secas, un puñado de almendras y otro de nueces, granos de trigo y de arroz, azúcar y pasas. A la derecha del cuenco situamos una vela verde y a la izquierda una naranja. Entonces las encendemos dando las gracias por los logros obtenidos y por los que no tardaran en llegar.
Ritual del Samhain o Día de Todos los Santos (1 noviembre)
Es el día mas poderoso para realizar un conjuro o ritual. Su origen es celta y en este día se celebraba el final de la temporada de cosechas y el inicio del llamado “Año Nuevo Celta” o de la estación oscura. Es tanto una fiesta de transición como de apertura a otro mundo, y ahí radica su poder. Más tarde la iglesia católica transformó esta celebración neo-pagana en el “Día de todos los santos”.
A primera hora de la madrugada del 1 de noviembre hay que encender una vela blanca y recitar:
En la página oficial de Alicia Collado podrás encontrar muchos de estos rituales, por ejemplo, esta oración hay que repetirla tres veces y dejaremos que la vela se consuma, procurando dejarla en un sitio seguro y siempre donde reciba la energía y luz de la luna.
Equinoccio de primavera (21 de marzo)
Este día es idóneo para pedir por proyectos nuevos, es un día de renacimiento de cosas dormidas y de comienzo.
Para realizar este ritual necesitaremos una piedra, una vela azul, una hoja de eucalipto y albahaca. Debemos encender la vela y quedarnos frente a ella con la piedra en la mano izquierda y las hojas en la derecha mientras damos las gracias por todo lo bueno que nos ofrece la vida. Nos quedaremos meditando como 15 minutos y luego introduciremos las hojas en una bolsita de tela y la pondremos debajo de nuestra almu fut. Debe estar allí por lo menos 15 días.
Equinoccio de otoño (21 de septiembre)
Es una fecha ideal para celebrar la vida y para aumentar la fertilidad y el deseo.
Cogeremos un cuenco de madera y en él introduciremos un trozo de aguacate, un puñado de arroz y un trocito de coco.
Entonces encendemos una vela de miel y dejamos caer su cera lentamente y efectuando círculos en dirección contraria a las agujas del reloj, mientras recitamos: “Que venga a mi la luz, que mi vida florezca y se llene de amor. Que haga cálidas mis noches y deseosos mis días”.
